Otoño en vena (Día 3): Sigüenza - Madrid
"Me percaté entonces de que la alegría es un estado del alma y no una cualidad de las cosas; que las cosas en sí mismas no son alegres ni tristes, sino que se limitan a reflejar el tono con que nosotros las envolvemos" . MIGUEL DELIBES – La sombra del ciprés es alargada . Una de las cosas buenas de ser sordo. No, no hay nada bueno en ser sordo . Absolutamente nada. Cero. No se lo deseo ni a mi peor enemigo... Pero sí, debo reconocer que, una vez que me quito el audífono, ya solo convivo con los acúfenos y que, salvo que su volumen sea elevado, no percibo ese tipo de ruidos que pueden convertir cualquier noche en un tormento. Por eso, para mí, dormir en albergues donde hay que compartir espacio con más gente, no constituye mayor problema. Muerto el perro, se acabó la rabia, que dice el refrán . “Gracias a ello” (lo pondría entre mil comillas, pero no quiero hacer llorar a la RAE) y al cansancio acumulado, la noche se convierte en un trámite reparador y, por segundo día con